1 – El pasado 28 de julio hubo elecciones presidenciales en Venezuela. En esa ocasión, el Tribunal Superior Electoral venezolano declaró a Nicolás Maduro el ganador con el 51.2 % de los votos. Ante los pataleos de fraude de la oposición, las actas, como corresponde, fueron entregadas al Tribunal Superior Electoral para su verificación. Todos los partidos participantes entregaron sus actas, menos la oposición encabezada por Corina Machado y el candidato Edmundo Gonzales. ¿Por qué sería que esta oposición no presentó sus actas ante este tribunal?
2 – La conspiración estadounidense y de la oposición contra esta elección estaba montada desde muchos meses antes de este certamen electoral. El plan declarado era no reconocer un triunfo de Maduro, aunque este ganara con el 100 por ciento de los votos. Así sucedió.
3 – Ante el declarado triunfo de Maduro, desde Washington y la Unión Europea pedían que se mostrasen las actas. En el mundo no hay un solo precedente en que, para aceptar a un candidato como ganador, este tenía que llevar las actas a aquellas potencias extranjeras. En contraste, en Ecuador, el Tribunal Superior Electoral de ese país declaró ganador a Daniel Noboa. Ese candidato sí que se quedó en el poder con un fraude vulgar realizado a la vista de todos. A él no le pidieron mostrar las actas, tal como sí lo hicieron con Nicolás Maduro. Washington y los europeos reconocieron de inmediato el triunfo de Noboa. ¿Por qué será este favoritismo?
4 – En este contexto, la petición de nuevas elecciones para Venezuela por parte del presidente colombiano Gustavo Petro se inscribe en el capítulo de yerros políticos. También entra en esa categoría la negativa de Lula da Silva de impedir que Venezuela entrara a formar parte de los BRICS.
5 – A esta altura del juego, una inteligencia como Petro ya ha debido comprender que el enfrentamiento de las élites que gobiernan a los Estados Unidos con Venezuela no es por defensa a la libertad y a la democracia o por derechos humanos o porque, según ellos, el chavismo se haya robado las elecciones o porque Maduro sea autoritario, porque si a eso vamos, no hay más autoritario que Donald Trump y el establishment que gobierna a Norteamérica. La planificada invasión a Venezuela es por petróleo y demás recursos naturales de ese país. Esto hay que tenerlo bien claro, para no dejarnos engañar por la propaganda de los medios de comunicación al servicio del imperio.
6 – Cuando en el 2002 le dieron el fallido golpe de Estado a Chávez, no fue porque este se había robado las elecciones, sino para afianzar la dominación hegemónica y el robo de recursos, que es lo mismo por lo que quieren derrocar a Maduro y al chavismo.
7 – En la situación actual de Venezuela, Petro insiste en establecer un “gobierno de transición compartido” antes de convocar elecciones libres y que no se excluya a María Corina Machado. Esta idea me parece un absurdo y más cuando viene de una mente brillante como la que tiene ese gobernante colombiano.
8 – Petro, al darle paso a Corina Machado, no se da cuenta de que esta mujer es toda una psicópata y una traidora a su patria, que es un personaje nefasto que ha contribuido a la destrucción de su país, que ha robado millones del erario venezolano junto a otros malos venezolanos. Para más, ¿qué puede esperar Venezuela de un ser malévolo como ella que está haciendo intensas diligencias para que fuerzas extranjeras invadan a su país y que promete entregarles a los invasores todos los recursos naturales de Venezuela?
9 – En el actual escenario venezolano, Petro no debe omitir, que la oposición, de llegar al poder, seguirá al pie de la letra el plan masacre de la CIA: “¡matar a no menos de 50 mil chavistas!”. Este propósito ha de tenerse en cuenta por los tantos precedentes históricos de este tipo de matanza llevados a cabo por los imperialismos. El genocidio en Gaza es el panorama que deben ver los chavistas, pues si son ingenuos, les espera la muerte a mansalva con un tiro en la cabeza. ¿Ignora Petro esta intención de la CIA?
10 – Con su idea de gobierno de transición compartido y nuevas elecciones, ¿qué garantías da Petro para que los chavistas no sean asesinados vilmente? Si él estuviera en los zapatos de los chavistas y fuera más objetivo, supiera, que si la CIA, Corina Machado y sus carteles sedientos de venganza llegaran al poder, inexorablemente ellos matarían inmisericordemente al mayor número de la militancia chavista. No olvidemos que los opositores al chavismo le gustan quemar vivas a las personas y darle un tiro en la nuca cuando los consideran chavistas. Los opositores al chavismo no son los santos ni demócratas que dicen ser. Ellos son gentes satánicas, capaces de cometer las diabluras más macabras. Con este tipo de precedente, si fuera su caso, ¿obtemperaría el gobernante colombiano a las nuevas elecciones que propone?
11 – Visto el futuro de sangre, represión y muerte que le espera al chavismo si llegara al poder la oposición liderada por Corina Machado; más cuando ella misma ha prometido realizar una purga en las filas del chavismo. Las atrocidades a suceder son imaginables dado que todos sabemos lo que significa una purga a cargo de fascistas como ella, quien además responde a los mandatos de la CIA.
12 – Visto el destino que tendrían los recursos naturales de Venezuela si la oposición al chavismo llega al poder. No olvidemos que Corina Machado ha prometido entregarle al imperialismo todos los recursos naturales de Venezuela para que las corporaciones la usufructúen a sus anchas como en antaño.
13 – En fin, visto el curso macabro que tendrá Venezuela y los desposeídos de ese país, principalmente el de los chavistas, en este caso, ¿es justo que Petro, esté haciendo caminos para que ese demonio de mujer llamada María Corina Machado y sus huestes con el respaldo de la CIA tengan la posibilidad de hacerse del poder de aquel maravilloso país andino?
14 – Ante la situación expuesta podemos afirmar, que Gustavo Petro yerra en grande con su propuesta de nuevas elecciones para Venezuela y de que no se excluya a Corina Machado del proceso electoral. Este yerro se podría decir, que sin proponérselo resulta hasta ladino, porque viene a ser parte del juego sucio con el que las élites del imperialismo apuestan contra Venezuela. Por suerte, el pueblo de los Estados Unidos no respalda la planificada invasión a Venezuela. Es que la nación estadounidense está tomando conciencia de lo maligno que son sus gobernantes, sus corporaciones transnacionales, el lobby judío, la gente de Wall Street y los del Complejo Industrial Militar, a los que solo los mueve la codicia más rampante. Para finalizar esta ponencia, hago una última pregunta a Gustavo Petro. Usted nos dice que es bolivariano. Si Simón Bolívar estuviera vivo, ¿apoyaría él el bando de Corina de Machado?
A Petro y a mis lectores, les dejo la palabra.
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